Los libros de texto suelen ser para el estudiante una herramienta escolar de mera lectura y memorización, sin un verdadero raciocino. La labor de este curso es que el alumno entienda que la educación no acaba con un 5.0 en el boletín de calificación o con un diploma al final de año. Para tener una educación de calidad, es imprescindible que el estudiante se vincule y se comprometa con aquello que está haciendo, con su formación. Que la formación en ética deba ser una base en donde el estudiante sostenga su compromiso consigo mismo y con la sociedad. Así, la ética debe ser una materia, para un viaje de autoconocimiento, autodescubrimiento que todos debemos emprender.